Los márgenes donde se mueve el ZPosibilismo socialdemócrata no es muy amplio. Acotados los territorios económico (en manos de la todopoderosa Germania o sus bancos), militar (pasada la rabieta contra Bush, llega la reverencia al nuevo emperador Obama) y financiero (Botín y Cia) solo habían quedado el de los derechos ciudadanos. Y ahí la labor del primer gobierno Zapatero fue plausible, beneficiándose claramente los colectivos femeninos y homosexuales. No soy ni mujer ni homosexual pero agradezco estas gracias y otras en este terreno. Sin embargo, el problema reside en que esta fachada políticamente correcta sirve para ocultar la total entrega del Gobierno a las estrategias que marcan las fuerzas fácticas de siempre, incluida la Iglesia (que ha salido muy bien parada económicamente con los socialistas). Pero no es Rouco y sus muchachos un poder comparable al que hoy sí tienen la banca o las grandes firmas inmobiliarias, y en este terreno la sumisión de los socialdemócratas es más que sonrojante. De ahí el peligro que encierran en sí mismas esas maniobras de distracción que presentan esa fachada "progresistas", políticamente correcta. No se construye un edificio progresista con un imafronte colorista, sino con una estructura auténticamente avanzada, y en este sentido, el inmueble socialdemócrata está diseñado por las mismas fuerzas que construyen los otros... Por eso el ZProgresismo es solo de piel.
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